Una gestión adecuada del almacenamiento y la distribución de los piensos es esencial para evitar pérdidas. Los piensos deben almacenarse en un entorno seco y templado, lejos de roedores, animales domésticos, aves y cualquier fuente de contaminación o suciedad.
¿Cómo almacenar correctamente los piensos para evitar pérdidas?
Almacenamiento de bolsas
Almacene las bolsas en paletas para que el aire circule. No se apoye en paredes mojadas.
Si es necesario, por razones de seguridad, vaciar el contenido en recipientes bien cerrados y ventilados.
Mantenimiento de silos
Los silos deben vaciarse por completo y limpiarse 3-4 veces al año.
Se utilizarán fumigantes durante las operaciones de limpieza para garantizar que los interiores se limpien a fondo.
Distribución de alimentos
No mezclar los alimentos balanceados con productos de eficacia nutricional, propiedades de conservación o calidad inciertas o insuficientemente probadas.
Asegúrate de que los comederos de los caballos están limpios: lávalos y sécalos antes de darles de comer.
Garantizar la disponibilidad de agua suficiente y de buena calidad: comederos o cubos limpios, agua potable limpia y disponible.
Caballos en reposo o en trabajo: diferencias importantes en cuanto a la alimentación
Un caballo en reposo bebe de 3 a 4 litros de agua por kg de materia seca ingerida (de 20 a 28 litros al día según la temperatura ambiente).
Un caballo sometido a un trabajo intenso necesita de 5 a 6 litros de agua por kg de materia seca ingerida. (de 50 a 75 litros por día, según el esfuerzo y la temperatura exterior).
Un caballo en reposo bebe de 3 a 4 litros de agua por kg de materia seca ingerida (de 20 a 28 litros al día según la temperatura ambiente).
Un caballo sometido a un trabajo intenso necesita de 5 a 6 litros de agua por kg de materia seca ingerida. (de 50 a 75 litros por día, según el esfuerzo y la temperatura exterior).
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